Coleccionistas...

 

Publicado en la revista - Slot, más que un hobby una pasión Nº6

 

 

 

Coleccionistas Puristas y Ediciones Limitadas Reales

 

 

Se puede interpretar como un concepto positivo y en algunos casos se utiliza como un adjetivo peyorativo. Lo que si queda claro, es que hay coleccionistas puristas que se sirven de diferentes criterios y que sus pautas de selección difieren bastante del resto de las colecciones al uso. Ni mejores ni peores, simplemente buscan unos parámetros y tienen unos protocolos de ajustes para adquirir sus piezas, muchos más exhaustivos y restrictivos, que otro tipo de coleccionistas.

De ahí, que para muchos una colección de un coleccionista purista sea un referente y una garantía de consulta. Pero la otra cara de la moneda puede venir para los fabricantes, y en donde el chocar con un coleccionista purista, detectan un nivel de exigencia hacia una determinada pieza, que sea más alto de lo habitual. En contra prestación, el coleccionista que se considere purista, deberá saber que lo mejor y lo destacable se paga, una máxima en piezas punteras y esa factura debe asumirla sin escatimar. Hay una máxima que se puede trasladar a todos los terrenos de la vida <<lo bueno se paga>>, y en el slot de primer nivel pasa lo mismo.

Por norma general, los coleccionistas puristas exigen primeras divisiones, ya que segundas filas quedan para otro tipo de mercado.

Por este motivo, debemos de tener presente ciertas características de cualquier modelo, como que cuando se publique que un determinado coche es una edición limitada se especifique con total transparencia y sin ningún tipo de extraña tortuosidad: el número de coches realizados, la numeración de y en cada pieza – si puede ser en el cartón (la trasera) y en el coche, mejor que mejor- y por supuesto, e imprescindible, con su correspondiente certificado de limitación que así lo acredite. A poder ser y como un valor añadido lo suyo sería que viniera ese certificado de autentificación con el nombre del propietario, aunque esta práctica aún no está plenamente instaurada. Toda información y acreditación adicional sobrevalorará la pieza. ¿Incluida la caja? Sí, incluida la caja original de esa pieza. Todo es importante, todo.

Otra cosa que se ha prestado mucho últimamente, es el hacer series limitadas de 7.000 piezas, o peor aún, un coche (exactamente un Porsche 911 GT3) edición limitada a 45.000 ejemplares... ¿limitado? Veamos: la adjetivación gratuita de <<limitado>> no significa que lo sea. Será un coche de serie más o menos amplio en su tirada, pero nunca un coche limitado, así que, no nos conformemos con ponerle una cifra final a un determinado modelo y colárnoslo como si fuera algo único, porque simplemente no lo es, y como dirían en el Caribe <<ya sabemos por donde le entra agua al coco>>.

Un coche especial debe ser eso, especial. No nos metan más goles por la escuadra, ¡por favor!

No vale estirar el chicle hasta el infinito, fingiendo que se nos pone en nuestras manos algo único, cuando es maquillar la realidad. Por ejemplo, en el mundo de la resina se esgrime el argumento de que el coste es muy elevado y que para rentabilizar el “máster” hay que ser prudentes y realizar varias decoraciones o tirada largas. Bien, pero siendo conscientes del deterioro y la pérdida de prestigio que puede invadir a la marca en concreto... si se asume ese riesgo, adelante. Recordemos alguna marca de reciente desaparición, que de un modelo hacia mil decoraciones, y al final, fue en su claro detrimento. Con todo esto podemos imaginarnos la consideración que tienen las reediciones, que no es otra que tirar por tierra el coche original y revendernos lo que en su día ya nos vendieron. ¿Lícito? sí ¿legítimo? también, ¿ético? desde mi opinión, NO. O al menos nada elegante.

No estoy por ello degollando en este sentido a marcas “generalistas”, ni situándolas en el paredón, sino a aquellos productos que sacan tildados de ediciones limitadas y que realmente no se ajustan a lo que se puede considerar un verdadera pieza de edición limitada... ¡señores! 1500 coches ¡no es una edición limitada! Es otra cosa... aunque luego está claro que cada cual puede poner sus diferentes pautas y tener su consideración sobre lo que enmarcar como edición limitada o no. Pero si que seria interesante establecer una franja, una línea, es decir, un auténtico y verdadero límite. Nunca olvidemos que cada cual es libre de hacer lo que quiera, y mucho más en gastarse su dinero en donde y en lo que le venga en gana.

Tenemos ahora por ejemplo la colección de Pegasos de TOP SLOT, una colección que en cuanto a sus características, se presenta con unas particulares óptimas para coleccionistas puristas. Encajan a priori en unos parámetros mínimos a seguir por cualquier coleccionista purista, siempre y cuando, y que es fundamental, cumpla el requisito básico de que le guste esa marca y sobre todo el modelo de coche a quien vaya a coleccionarlo.

Por lo demás, la presentación es tan buena como acertada (no es una caja grande, se ajusta muy bien a las dimensiones del coche, acertado diseño y viene con una transparencia para poder lucir la escala sin tener que sacarlo de esa caja), además de ese nuevo formato- que evita cualquier deterioro del coche por el ambiente - se le puede echar al menos algún vistazo <<in situ>> sin manipulaciones gratuitas, ni “tocamientos” curiosos. Cada coche viene con su propia numeración y la tirada es de 300 unidades. Además la colección completa cuenta con el favor añadido de que se compone de 30 piezas. Se está publicitando a buen nivel y tiene una adecuada distribución, lo cual puede suponer 5 años de colección- para hacerse con todos los coches- un aliciente más de principio a fin, pues se puede optar a una pieza en tiempos ajustados y a precios (hablamos de resinas) apropiados. Precios apropiados que no deberían trastocar por haber triunfado con sus primeras referencias y en consecuencia morir de éxito.

El rey de reyes del slot (en resina), como pueda ser la marca SLOT CLASSIC también cumple con creces ciertas premisas en cuanto a un coleccionismo en estado puro, aunque son muchos los coleccionistas que echan de menos una presentación mas uniforme y lograda referente a la caja (insisto, hasta la caja-presentación- cuenta) pero los coches, esos coches, son sencillamente espectaculares en todo.

 

 

Igualmente, quien se está posicionando en un lugar destacable a base de esfuerzo y sobre todo un gran trabajo en línea directa con los coleccionistas, es HOBBY CLASSIC quien igual que las anteriores marcas, genera tendencia y sus piezas cada vez se ajustan mas a criterios de puro coleccionismo, de ahí que sus modelos no solo se esperen con impaciencia sino que se agoten casi nada más salir al mercado. Ya se desmarcó con la tirada de 69 unidades del SEAT 600 Formichetta, y ahora con el lanzamiento de su Pegaso “BACALAO” que, aún con un precio potente, el mercado la absorbe sin contemplaciones no dejándola escapar: presentación de lujo y con una tirada igualmente destacable de 200 piezas, está totalmente agotado, pero que ante una pieza de semejante características con toda la pinta de posicionarse como pionera y parangón de futuras realizaciones, es una de lo que esperamos vengan mas detrás, en donde empieza a esperarse y valorarse alguna nueva invención… esta vez las puertas se abren con una auténtica llave ¡increíble!

 

 

 

Y viene gente pisando fuerte por detrás con nuevas realizaciones, precios competitivos y sobre todo, ganas de abrir brecha y hacerse un hueco en este mundo, en “nuestro mundillo” y aunque no es el momento más indicado porque la crisis golpea con fuerza y más a los hobbyes, ellos procuran mantenerse al frente de las que se están empezando ya por algunos en catalogar como piezas de autor en resina: Slot Real Car, JED Slot, Resin Slot Car, Model Master…

 

 

 

Aunque no nos olvidemos que el diablo siempre está presente y si al mercado se le ahoga- desbordado por la oferta- el propio mercado hará su selección natural, y ese es el riesgo (máximo peligro) que ahora mismo se empieza a sentir en el mundo del <<slot de resina>> que puede ser que muchas marcas se queden en sus comienzos sin poder crecer y desarrollarse.

Pero mientras tanto, disfrutemos de todo lo que se nos presenta, pues la autenticidad de nuestra afición no es otra que el divertimento y la satisfacción, un deleite sin limitaciones, al contrario que esas piezas limitadas que tanto nos enloquecen.

^